Encontré esta canción, que también Carlos me ponía todo el tiempo. NO ORDINARY LOVE. ¿Tendrá que ver con el UNUSUAL YOU de Britney, que también me dedicaba?
¿Es acaso que no pudo entender lo "no ordinario", lo "inusual" o simplemente no le gustó romper sus propios esquemas?
Pudo haber sido tan feliz.
I gave you all the love I got
I gave you more than I could give
I gave you love
I gave you all that I have inside
And you took my love
You took my love
Didn't I tell you
What I believe
Somebody say that
A love like that won't last
Didn't I give you
All that I've got to give baby
I gave you all the love I got
I gave you more than I could give
I gave you love
I gave you all that I have inside
And you took my love
You took my love
I keep crying
I keep trying for you
There's nothing like you and I baby
This is no ordinary love
No ordinary love
This is no ordinary love
No ordinary love
When you came my way
You brightened every day
With your sweet smile
Didn't I tell you
What I believe
Did somebody say that
A love like that won't last
Didn't I give you
All that I've got to give baby
This is no ordinary love
No ordinary love
This is no ordinary love
No ordinary love
I keep crying
I keep trying for you
There's nothing like you and I baby
This is no ordinary love
No ordinary love
This is no ordinary love
No ordinary love
Keep trying for you
Keep crying for you
Keep flying for you
Keep flying I'm falling
I'm falling
Keep trying for you
Keep crying for you
Keep flying for you
Keep flying and I'm falling
and I'm falling
lunes, 11 de enero de 2010
No necesito para verte ir tan lejos, ni tampoco para hablarte oír tu voz; cierro los ojos y al instante estás aquí; te veo tan feliz, la calma vuelve a mí. Pero te fuiste sin saber lo que sentía, no tuve tiempo de explicar...
Esto lo posteó una amiga en Facebook. Wow. Describe mucho de lo que he vivido.
Esto lo posteó una amiga en Facebook. Wow. Describe mucho de lo que he vivido.
EXTRACTOS DE EL ARTE DE AMAR c. AMOR ERÓTICO
El amor puede inspirar el deseo de la unión sexual; en tal caso, la relación física hállase libre de avidez, del deseo de conquistar o ser conquistado, pero está fundido con la ternura. Si el deseo de unión física no está estimulado por el amor, si el amor erótico no es a la vez fraterno, jamás conduce a la unión salvo en un sentido orgiástico y transitorio. La atracción sexual crea,por un momento, la ilusión de la unión, pero, sin amor, tal «unión» deja a los desconocidos tan separados como antes -a veces los hace avergonzarse el uno del otro, o aun odiarse recíprocamente, porque, cuando la ilusión se desvanece, sienten su separación más
agudamente que antes-. La ternura no es en modo alguno, como creía Freud, una sublimación del instinto sexual; es el producto directo del amor fraterno, y existe tanto en las formas físicas del amor, como en las no físicas.
Amar a alguien no es meramente un sentimiento poderoso -es una decisión, es un juicio, es una promesa-. Si el amor no fuera más que un sentimiento, no existirían bases para la promesa de amarse eternamente. Un sentimiento comienza y puede
desaparecer. ¿Cómo puedo yo juzgar que durará eternamente, si mi acto no implica juicio y decisión?
En la medida en que todos somos uno, podemos amar a todos de la misma manera, en el sentido del amor fraternal. Pero en la medida en que todos también somos diferentes, el amor erótico requiere ciertos elementos específicos y altamente individuales que
existen entre algunos seres, pero no entre todos.
Ambos puntos de vista, entonces, el del amor erótico como una atracción completamente individual, única entre dos personas específicas, y el de que el amor erótico no es otra cosa que un acto de la voluntad, son verdaderos -o, como sería quizá más exacto, la verdad no es lo uno ni lo otro-. De ahí que la idea de una relación que puede disolverse fácilmente si no resulta exitosa es tan errónea como
la idea de que tal relación no debe disolverse bajo ninguna circunstancia.
agudamente que antes-. La ternura no es en modo alguno, como creía Freud, una sublimación del instinto sexual; es el producto directo del amor fraterno, y existe tanto en las formas físicas del amor, como en las no físicas.
Amar a alguien no es meramente un sentimiento poderoso -es una decisión, es un juicio, es una promesa-. Si el amor no fuera más que un sentimiento, no existirían bases para la promesa de amarse eternamente. Un sentimiento comienza y puede
desaparecer. ¿Cómo puedo yo juzgar que durará eternamente, si mi acto no implica juicio y decisión?
En la medida en que todos somos uno, podemos amar a todos de la misma manera, en el sentido del amor fraternal. Pero en la medida en que todos también somos diferentes, el amor erótico requiere ciertos elementos específicos y altamente individuales que
existen entre algunos seres, pero no entre todos.
Ambos puntos de vista, entonces, el del amor erótico como una atracción completamente individual, única entre dos personas específicas, y el de que el amor erótico no es otra cosa que un acto de la voluntad, son verdaderos -o, como sería quizá más exacto, la verdad no es lo uno ni lo otro-. De ahí que la idea de una relación que puede disolverse fácilmente si no resulta exitosa es tan errónea como
la idea de que tal relación no debe disolverse bajo ninguna circunstancia.
ONIRISMO
El onirismo (< griego "sueño" y "doctrina") es una actividad mental que se manifiesta en un síndrome de confusión que está especialmente caracterizado por alucinaciones visuales, que pueden indicar una disolución parcial o completa con la consciencia o la realidad.
-wikipedia
-wikipedia
EL MUNDO DE LO ONÍRICO
He vuelto a soñar con él. Noches complicadas, agitadas; mi cuerpo está dormido, mi cerebro no. Me muevo, segurmante hablo, despierto, no quiero regresar al mundo real, porque duele, duele más, ahí no está él, ahí sólo estoy yo, sin él, sin saber de él, pero teniéndolo en mi cabeza, después de una noche más, dedicada a él.
Me desperté, quería volver a dormir, porque al despertar me dolió el pecho. Lo extrañé, me volvió a doler su indiferencia, su falta de amor, sus engaños que sigo sin entender.
Me preocupa que mi sentimiento general hacia él es ahora en un plano superficial, pero que me duele en lo más profundo de mi ser. Me decía Eleni que más que extrañarlo, puede ser que sueño con él por lo que significa para mí. Es real. Él tiene muchas cosas que a mí me gustaría tener. Pero todo esto es superficial, porque al final lo que tiene Carlos es eso, un físico, una forma sin un fondo claro.
Sé que soy guapo. Sé que a muchos niños les encanto. Pero me gustaría serlo más, mucho más, para no sentirme así de inseguro frente a Carlos. Él apenas mide 1.65 metros. Usa pupilentes verdes y en muchas ocasiones usa maquillaje. Cuida su piel, ante todas las cosas. Invierte todo su dinero en ello. Obtiene lo que quiere. Sus defectos no son importantes y los sabe manejar. Tiene un pelo perfecto, una piel perfecta, unas facciones perfectamente finitas. Su cuerpo no tiene mucho chiste.
En cambio, yo soy guapo, pero mis características por sí solas no son lo entendido como estético. No soy fotogénico, en realidad soy más guapo en persona. Carlos es más guapo en foto, por la perfección de sus características físicas. En persona no siempre se ve tan bien. Mi pelo es difícil, rebelde. Mi nariz es ancha. Mi piel está maltratada y eso hace que cada vez me vea más grande, aunque tengo 25 años. Yo tengo ojos miel, con tonos verdes, claros, naturales. No tengo que usar pupilentes. Soy blanco, mido 1.78, tengo buen cuerpo.
Mis traumas: mi nariz y mi piel. Un poco también que tengo gastroenteritis y se me inflama el abdomen con muchos alimentos. Quisiera que mi piel fuera perfecta y operarme la nariz.
¿Qué me gusta de mí? Mi cuerpo, mis brazos, mis piernas, mis glúteos, mis ojos. Tengo una mirada muy bella. La forma y color de mis ojos son muy expresivos, son claros y son transparentes. Tengo en la mirada la inocencia que me caracteriza, pero también el miedo. Cuando mi piel se pone mejor, me gusta mi tono. Soy rosa.
Mi físico es la fuente de mi inseguridad principal. Me gustaría ser mucho más guapo. Estoy mucho más seguro de lo que tengo internamente, pero no siempre me siento guapo. Ser guapo es una actitud, me decía Rubén. ¿Cómo puedo vencer esas inseguridades de mi físico?
Para Carlos yo era muy guapo. Para mí él no lo era. Después lo fue. Hoy lo es. No sé si para él yo lo soy todavía. Cuando estábamos juntos, nos encantábamos. El sexo era el mejor que he tenido en mi vida; nos conectábamos, nos amábamos, nos disfrutábamos, nos tocábamos, nos besábamos sin parar durante todo el acto. Carlos disfrutaba de sentir mi placer. Era más que el físico.
Hoy Danniel me dijo que me veía muy bien desnudo.
A Gyan le gustó pintarme y lo inspiré bastante. ¿Cómo puedo verme siempre al espejo y gustarme? ¿Cómo puedo dejar de ver tanto mis defectos?
Audrey decía que Carlos de repente se ve tan guapo, que ella le quitaría lo gay. Me gustaría provocar esas reacciones también.
Quizás mi problema es que quiero gustarle a los demás. Quiero que los demás me consideren guapo. ¿Debería bastar con que yo esté consciente de esto?
¿O debo conformarme con que quizás no lo soy tanto?
Sí, lo acepto. Tengo la inseguridad más grande en mi físico. Quiero enfrentarla.
Creo que esos sueños con Carlos significan eso, que él para mí era ese reto, jugaba con mi inseguridad.
Quisero ser capaz de conseguir al hombre que quiera, porque soy atractivo. Eso quiero aprender.
Me desperté, quería volver a dormir, porque al despertar me dolió el pecho. Lo extrañé, me volvió a doler su indiferencia, su falta de amor, sus engaños que sigo sin entender.
Me preocupa que mi sentimiento general hacia él es ahora en un plano superficial, pero que me duele en lo más profundo de mi ser. Me decía Eleni que más que extrañarlo, puede ser que sueño con él por lo que significa para mí. Es real. Él tiene muchas cosas que a mí me gustaría tener. Pero todo esto es superficial, porque al final lo que tiene Carlos es eso, un físico, una forma sin un fondo claro.
Sé que soy guapo. Sé que a muchos niños les encanto. Pero me gustaría serlo más, mucho más, para no sentirme así de inseguro frente a Carlos. Él apenas mide 1.65 metros. Usa pupilentes verdes y en muchas ocasiones usa maquillaje. Cuida su piel, ante todas las cosas. Invierte todo su dinero en ello. Obtiene lo que quiere. Sus defectos no son importantes y los sabe manejar. Tiene un pelo perfecto, una piel perfecta, unas facciones perfectamente finitas. Su cuerpo no tiene mucho chiste.
En cambio, yo soy guapo, pero mis características por sí solas no son lo entendido como estético. No soy fotogénico, en realidad soy más guapo en persona. Carlos es más guapo en foto, por la perfección de sus características físicas. En persona no siempre se ve tan bien. Mi pelo es difícil, rebelde. Mi nariz es ancha. Mi piel está maltratada y eso hace que cada vez me vea más grande, aunque tengo 25 años. Yo tengo ojos miel, con tonos verdes, claros, naturales. No tengo que usar pupilentes. Soy blanco, mido 1.78, tengo buen cuerpo.
Mis traumas: mi nariz y mi piel. Un poco también que tengo gastroenteritis y se me inflama el abdomen con muchos alimentos. Quisiera que mi piel fuera perfecta y operarme la nariz.
¿Qué me gusta de mí? Mi cuerpo, mis brazos, mis piernas, mis glúteos, mis ojos. Tengo una mirada muy bella. La forma y color de mis ojos son muy expresivos, son claros y son transparentes. Tengo en la mirada la inocencia que me caracteriza, pero también el miedo. Cuando mi piel se pone mejor, me gusta mi tono. Soy rosa.
Mi físico es la fuente de mi inseguridad principal. Me gustaría ser mucho más guapo. Estoy mucho más seguro de lo que tengo internamente, pero no siempre me siento guapo. Ser guapo es una actitud, me decía Rubén. ¿Cómo puedo vencer esas inseguridades de mi físico?
Para Carlos yo era muy guapo. Para mí él no lo era. Después lo fue. Hoy lo es. No sé si para él yo lo soy todavía. Cuando estábamos juntos, nos encantábamos. El sexo era el mejor que he tenido en mi vida; nos conectábamos, nos amábamos, nos disfrutábamos, nos tocábamos, nos besábamos sin parar durante todo el acto. Carlos disfrutaba de sentir mi placer. Era más que el físico.
Hoy Danniel me dijo que me veía muy bien desnudo.
A Gyan le gustó pintarme y lo inspiré bastante. ¿Cómo puedo verme siempre al espejo y gustarme? ¿Cómo puedo dejar de ver tanto mis defectos?
Audrey decía que Carlos de repente se ve tan guapo, que ella le quitaría lo gay. Me gustaría provocar esas reacciones también.
Quizás mi problema es que quiero gustarle a los demás. Quiero que los demás me consideren guapo. ¿Debería bastar con que yo esté consciente de esto?
¿O debo conformarme con que quizás no lo soy tanto?
Sí, lo acepto. Tengo la inseguridad más grande en mi físico. Quiero enfrentarla.
Creo que esos sueños con Carlos significan eso, que él para mí era ese reto, jugaba con mi inseguridad.
Quisero ser capaz de conseguir al hombre que quiera, porque soy atractivo. Eso quiero aprender.
domingo, 10 de enero de 2010
SOÑANDO SOÑANDO VOY
Varios pasos he dado. Muy buenos.
Estoy haciendo cosas que me gustan. Ayer posé todo el día desnudo para un pintor. Una de las obras me fascinó y me la va a dar, una vez la incluya en su portafolio. :) Hoy empezará una obra de gran formato, pero para ella posaré durante varios días. :)
Llevo dos días con un sueño muy parecido: sueño que estoy en Madrid, aunque en el primer sueño vivía ahí y en el segundo estaba de vacaciones y todo el tiempo sentía que se me acababan las horas. Quería ir a todas partes, a Sol, a Chueca, a Ópera, a todas partes.
¿Estaré anhelando regresar a esa etapa tan feliz de mi vida? ¿Realmente volvería a ser tan feliz? Ya no iría como estudiante, mantenido por mi padre. Iría a trabajar. ¿Sería eso diferente?
Estoy haciendo cosas que me gustan. Ayer posé todo el día desnudo para un pintor. Una de las obras me fascinó y me la va a dar, una vez la incluya en su portafolio. :) Hoy empezará una obra de gran formato, pero para ella posaré durante varios días. :)
Llevo dos días con un sueño muy parecido: sueño que estoy en Madrid, aunque en el primer sueño vivía ahí y en el segundo estaba de vacaciones y todo el tiempo sentía que se me acababan las horas. Quería ir a todas partes, a Sol, a Chueca, a Ópera, a todas partes.
¿Estaré anhelando regresar a esa etapa tan feliz de mi vida? ¿Realmente volvería a ser tan feliz? Ya no iría como estudiante, mantenido por mi padre. Iría a trabajar. ¿Sería eso diferente?
jueves, 7 de enero de 2010
miércoles, 6 de enero de 2010
CERRANDO CÍRCULOS
Es muy fuerte. La vida misma me ha demostrado que no estoy tan mal.
Ayer fue un día de enfrentar miedos, de revivir momentos sin siquiera buscarlo. Mi hermano tenía que ir a comprar regalos para sus amigos de Montréal, pues se regresaba al día siguiente. Quería ir a Coyoacán. Yo me rehusaba a ir desde que corté con Carlos. Lo acepto, le tenía pavor, pues la zona me recuerda esos momentos de felicidad a su lado. Intenté que mi hermano quisiera ir al centro. No, no quiso, quiso Coyoacán. Fuimos ahí. Quise enfrentarlo y pasar por uno de los lugares donde siempre estábamos: la estética de su roommate, Iván. Le hablé a Yahara, amiga de todos ellos, que me conoció al mismo tiempo que a Carlos, para ir a darle su abrazo de año nuevo. La vi, fui a la estética, saludé a Iván, quien según Yahara ya es "uña y mugre" con Carlos.
Yahara me habló de Carlos, más que de ella. Yo no cambié el tema, pregunté. Al poco tiempo nos fuimos, no pasó nada. Estoy sano y salvo. Sentí nostalgia, pero ya no sentí su presencia. Antes comimos en el mercado de Higera, a donde iba con Carlos al menos un par de veces a la semana. Me senté exactamente donde me sentaba con él, pero iba con mi hermano.
Regresé a casa, antes de ir a buscar unas botellas de mezcal que quería llevar mi hermano. Ahí hablé con Audrey para preguntarle dónde es La Botica, que le había recomendado a mi hermano. Me dijo la ubicación y le pregunté si no era lo que también se conoce como La Mezcalería. Me dijo que sí. Ahí conocí a Carlos.
Fuimos a comprar las botellas, como a las 9 de la noche. Sentí un poco de tristeza, porque recordé ese día tan maravilloso para mí, cuando nos conocimos. Ahí empezó mi historia de amor. Se lo dije a mi hermano y me contestó: pues aquí termínala hoy. Sin buscarlo estuve en los dos lugares que hacen mi historia con Carlos: donde lo conocí y donde vivimos nuestra historia, que es donde también la terminamos.
"Casualmente", cuando hablé con Audrey para preguntarle sobre La Botica, me dijo que Carlos comentó nuestra foto, en la que estamos viendo cómo se fueron nuestros globos con cartas a los reyes magos.
La línea de comentarios es la siguiente:
A Missy Aff y Pamela Sabines les gusta esto.
Jorge Espinosa Villavicencio
mi favorita... nuestras caritas de ilusión... :) xxx The best is yet to come... :)
Ayer a las 15:24 ·
Missy Aff
(sigh)...i know my love.
Ayer a las 15:25 · Denunciar
Carlos Merino
Lo ven como no soy tan malo...JAJAJA al menos os he dejao una amistad...
Ayer a las 19:24 · Denunciar
Missy Aff
Claro que no eres malo estas rebueno ahahah. Feliz todo Carlitos, ojala nos veamos pronto. Bss.
Ayer a las 19:25 · Denunciar
Valeria Gauna
GuaPo Material!
Hace 5 horas · Denunciar
Missy Aff
verdad que chi!
Hace 4 horas · Denunciar
Carlos Merino
Ya me perdi...
Hace 4 horas · Denunciar
Escribe un comentario...
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Qué fuerte me parece que sea capaz de incluso burlarse del daño que hizo. De decir que no es TAN malo, porque gracias a él nos conocimos Audrey y yo. Obvio se burla con el JAJAJAJA. Su último comentario sólo demostró que creyó que Valeria dijo algo sobre él, cuando ella se refería al material: LAS FOTOS.
Todo sucedió el mismo día. El día en el que yo había decidido cerrar mi círculo. Me había puesto de límite el martes 5 de enero, porque yo regresaba el miércoles 6 a la oficina y quería estar como nuevo. Sin buscarlo conscientemente, todo pasó en la tarde del 5. Me sentí mejor.
Ayer fue un día de enfrentar miedos, de revivir momentos sin siquiera buscarlo. Mi hermano tenía que ir a comprar regalos para sus amigos de Montréal, pues se regresaba al día siguiente. Quería ir a Coyoacán. Yo me rehusaba a ir desde que corté con Carlos. Lo acepto, le tenía pavor, pues la zona me recuerda esos momentos de felicidad a su lado. Intenté que mi hermano quisiera ir al centro. No, no quiso, quiso Coyoacán. Fuimos ahí. Quise enfrentarlo y pasar por uno de los lugares donde siempre estábamos: la estética de su roommate, Iván. Le hablé a Yahara, amiga de todos ellos, que me conoció al mismo tiempo que a Carlos, para ir a darle su abrazo de año nuevo. La vi, fui a la estética, saludé a Iván, quien según Yahara ya es "uña y mugre" con Carlos.
Yahara me habló de Carlos, más que de ella. Yo no cambié el tema, pregunté. Al poco tiempo nos fuimos, no pasó nada. Estoy sano y salvo. Sentí nostalgia, pero ya no sentí su presencia. Antes comimos en el mercado de Higera, a donde iba con Carlos al menos un par de veces a la semana. Me senté exactamente donde me sentaba con él, pero iba con mi hermano.
Regresé a casa, antes de ir a buscar unas botellas de mezcal que quería llevar mi hermano. Ahí hablé con Audrey para preguntarle dónde es La Botica, que le había recomendado a mi hermano. Me dijo la ubicación y le pregunté si no era lo que también se conoce como La Mezcalería. Me dijo que sí. Ahí conocí a Carlos.
Fuimos a comprar las botellas, como a las 9 de la noche. Sentí un poco de tristeza, porque recordé ese día tan maravilloso para mí, cuando nos conocimos. Ahí empezó mi historia de amor. Se lo dije a mi hermano y me contestó: pues aquí termínala hoy. Sin buscarlo estuve en los dos lugares que hacen mi historia con Carlos: donde lo conocí y donde vivimos nuestra historia, que es donde también la terminamos.
"Casualmente", cuando hablé con Audrey para preguntarle sobre La Botica, me dijo que Carlos comentó nuestra foto, en la que estamos viendo cómo se fueron nuestros globos con cartas a los reyes magos.
La línea de comentarios es la siguiente:
A Missy Aff y Pamela Sabines les gusta esto.
Jorge Espinosa Villavicencio
mi favorita... nuestras caritas de ilusión... :) xxx The best is yet to come... :)
Ayer a las 15:24 ·
Missy Aff
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Carlos Merino
Lo ven como no soy tan malo...JAJAJA al menos os he dejao una amistad...
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Claro que no eres malo estas rebueno ahahah. Feliz todo Carlitos, ojala nos veamos pronto. Bss.
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Valeria Gauna
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Carlos Merino
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Qué fuerte me parece que sea capaz de incluso burlarse del daño que hizo. De decir que no es TAN malo, porque gracias a él nos conocimos Audrey y yo. Obvio se burla con el JAJAJAJA. Su último comentario sólo demostró que creyó que Valeria dijo algo sobre él, cuando ella se refería al material: LAS FOTOS.
Todo sucedió el mismo día. El día en el que yo había decidido cerrar mi círculo. Me había puesto de límite el martes 5 de enero, porque yo regresaba el miércoles 6 a la oficina y quería estar como nuevo. Sin buscarlo conscientemente, todo pasó en la tarde del 5. Me sentí mejor.
domingo, 3 de enero de 2010
INTROSPECCIÓN IV: ESTAR CON OTRO HOMBRE, EL SEXO, EL SENTIMIENTO DE EXTRAÑAR
Desde que terminé con Carlos, he estado ya con otros hombres. Ha sido extraño, porque cada experiencia ha sido diferente.
Tengo un vecino que se llama John. Desde hace un tiempo habíamos querido vernos, pues nos atraímos mucho. Dos días después del fin de mi relación, nos vimos y tuvimos un sexo bastante placentero. Me hizo sentir bien, porque me cuidó y se preocupó porque yo estuviera bien, a pesar de ser un sexo sin amor, entre dos extraños que se atraen físicamente. Él es muy guapo. Es mucho más guapo que Carlos y físicamente disfruté mucho de su cuerpo. Pero no era lo mismo. Con Carlos hacía el amor, todo el día, todo el tiempo, con locura, con amor, aunque físicamente no fuera el mejor.
Volví a ver a John una semana después. No lo disfruté tanto, porque ya no estaba tan en shock, sino que ya estaba muy triste. Pensé aún más en Carlos.
Después fui con una pareja que buscaba a un hombre guapo para un trío. Lo hice. No me gustó. Me sentí vacío, me sentí mal. Salí llorando de su casa.
Ayer conocí a Daniel, en el antro. Sin yo saberlo, Daniel también es amigo de Iván, el roommate de Carlos. Iván nos vio juntos. Me gustó, lo besé, me fui con él y pasamos la noche juntos. No me gustó. No sentía nada. No tenía el deseo sexual que me caracteriza y vamos, Daniel es un hombre mucho más parecido al tipo de hombre que me gusta: varonil, alto, muy macho, fuerte. Carlos era pequeño, femenino, delgado, sin cuerpo, con una cara preciosa y una mirada que era sólo mía y para mí. Carlos me hacía el amor, penetraba en todo mi ser y en ese acto estábamos física y espiritualmente conectados. Carlos me provocaba orgasmos sin penetrarme siquiera. Lo lograba con sólo tocarme, besar todo mi cuerpo, mi cuello, mi espalda, mis orjeas, mis glúteos, mis piernas, mi ano. Llegué a tener orgasmos múltiples con sólo esas caricias, de manos y lengua. Era el sexo más maravilloso. Es quizás lo que más extraño, pues nadie me había hecho sentir así y al día de hoy, nadie más lo ha hecho.
Me enamoré de sus besos. Extraño sus besos, pues ahí abría su alma hacia a mí y yo la mía hacia él. Nos entregábamos el uno al otro en cada uno de esos besos que duraban horas.
Eso no lo he encontrado en otro hombre. Quizás por eso lo extraño.
Tengo un vecino que se llama John. Desde hace un tiempo habíamos querido vernos, pues nos atraímos mucho. Dos días después del fin de mi relación, nos vimos y tuvimos un sexo bastante placentero. Me hizo sentir bien, porque me cuidó y se preocupó porque yo estuviera bien, a pesar de ser un sexo sin amor, entre dos extraños que se atraen físicamente. Él es muy guapo. Es mucho más guapo que Carlos y físicamente disfruté mucho de su cuerpo. Pero no era lo mismo. Con Carlos hacía el amor, todo el día, todo el tiempo, con locura, con amor, aunque físicamente no fuera el mejor.
Volví a ver a John una semana después. No lo disfruté tanto, porque ya no estaba tan en shock, sino que ya estaba muy triste. Pensé aún más en Carlos.
Después fui con una pareja que buscaba a un hombre guapo para un trío. Lo hice. No me gustó. Me sentí vacío, me sentí mal. Salí llorando de su casa.
Ayer conocí a Daniel, en el antro. Sin yo saberlo, Daniel también es amigo de Iván, el roommate de Carlos. Iván nos vio juntos. Me gustó, lo besé, me fui con él y pasamos la noche juntos. No me gustó. No sentía nada. No tenía el deseo sexual que me caracteriza y vamos, Daniel es un hombre mucho más parecido al tipo de hombre que me gusta: varonil, alto, muy macho, fuerte. Carlos era pequeño, femenino, delgado, sin cuerpo, con una cara preciosa y una mirada que era sólo mía y para mí. Carlos me hacía el amor, penetraba en todo mi ser y en ese acto estábamos física y espiritualmente conectados. Carlos me provocaba orgasmos sin penetrarme siquiera. Lo lograba con sólo tocarme, besar todo mi cuerpo, mi cuello, mi espalda, mis orjeas, mis glúteos, mis piernas, mi ano. Llegué a tener orgasmos múltiples con sólo esas caricias, de manos y lengua. Era el sexo más maravilloso. Es quizás lo que más extraño, pues nadie me había hecho sentir así y al día de hoy, nadie más lo ha hecho.
Me enamoré de sus besos. Extraño sus besos, pues ahí abría su alma hacia a mí y yo la mía hacia él. Nos entregábamos el uno al otro en cada uno de esos besos que duraban horas.
Eso no lo he encontrado en otro hombre. Quizás por eso lo extraño.
MI RESPUESTA A SU MENSAJE
Mi respuesta a su mensaje de año nuevo sería:
"Gracias Carlos. Igualmente. Para mí no sólo fue un placer conocerte. Para mí andar contigo fue tocar el fondo más negro que he permitido en mi vida. Gracias a eso, cuando terminamos, busqué desesperadamente la salida y pedí la ayuda necesaria. Te agradezco eso porque con ello removí muchos sentimientos que tenía sepultados, desde mucho antes de siquiera conocerte. Al verme hundido en ese hoyo, me di cuenta de esos sentimientos que ni sabía que tenía sepultados. Gracias porque con todo esto, hoy soy una mucho mejor persona. Con este proceso estoy creciendo como nunca lo había hecho, a pasos acelerados. Con amor, feliz año nuevo".
Por supuesto, no se lo escribí. Mis palabras son desperdiciadas si las dedico a él, pues simplemente, no las comprende. Y no es por estupidez, es por bloqueo mental voluntario. Este mensaje es demasiado profundo como para contestar a una estupidez como la que él escribió.
Una vez le mandé un mensaje sólo para recordarle que siempre lo amaré, aunque ya no sea un amor de pareja. Es verdad y es muy triste que nunca podrá recibir ese amor, que ya existe en mi corazón y no puede morir. Mi amor es eterno, para todos los seres humanos que lo han querido recibir alguna vez, en diferentes formas: amigos, familia, parejas.
"Gracias Carlos. Igualmente. Para mí no sólo fue un placer conocerte. Para mí andar contigo fue tocar el fondo más negro que he permitido en mi vida. Gracias a eso, cuando terminamos, busqué desesperadamente la salida y pedí la ayuda necesaria. Te agradezco eso porque con ello removí muchos sentimientos que tenía sepultados, desde mucho antes de siquiera conocerte. Al verme hundido en ese hoyo, me di cuenta de esos sentimientos que ni sabía que tenía sepultados. Gracias porque con todo esto, hoy soy una mucho mejor persona. Con este proceso estoy creciendo como nunca lo había hecho, a pasos acelerados. Con amor, feliz año nuevo".
Por supuesto, no se lo escribí. Mis palabras son desperdiciadas si las dedico a él, pues simplemente, no las comprende. Y no es por estupidez, es por bloqueo mental voluntario. Este mensaje es demasiado profundo como para contestar a una estupidez como la que él escribió.
Una vez le mandé un mensaje sólo para recordarle que siempre lo amaré, aunque ya no sea un amor de pareja. Es verdad y es muy triste que nunca podrá recibir ese amor, que ya existe en mi corazón y no puede morir. Mi amor es eterno, para todos los seres humanos que lo han querido recibir alguna vez, en diferentes formas: amigos, familia, parejas.
sábado, 2 de enero de 2010
INTROSPECCIÓN III: AÑO NUEVO Y LOS SUEÑOS QUE LLEGARON
Sepultar 2009. Dejarlo atrás, sin perder los aprendizajes. Ése es mi reto de hoy. Cerrar 2009 significa cerrar círculos, cerrar heridas, cambiar de energía a un estado de tranquilidad. Pero no lo he logrado encontrar.
Me llama la atención cómo para Carlos fue tan fácil como mandarme un mensaje que decía:
FUE UN PLACER CONOCERTE EN 2009. TODO LO MEJOR. MUAK!
Un mensaje un poco cínico, intentando ser cordial, pero que realmente no era necesario, pues la realidad es que me dolió. Yo no quise contestar, pero le marqué al terminar la fiesta de año nuevo, a las 7 de la mañana. No pude resistir más. Por supuesto, no contestó.
Me sorprende y me duele que la persona con quien he vivido la relación más especial, más intensa y más profunda de mi vida, por muy corta que haya sido, sea tan indiferente. Para él fui uno más en la lista, que ya tiene una palomita. CHECK. Para mí esta relación significó todo, significó cambiar mis planes, mis actividades, mis sueños. Mis sueños eran con él a mi lado, por siempre. Soy un romántico soñador. Yo creí que él, el novio que he tenido con los defectos más grandes de todos, era mi príncipe azul, porque lo acepté y lo amé con absolutamente todas sus características.
Fue inevitable pensar en el año nuevo en todo lo que viví en 2009. Me puse triste en varios momentos. Me puso triste no haberlo pasado por primera vez con mi mamá. No me gustó. No quiero volverlo a hacer así. A mi familia es a la primera que quiero desearle feliz año nuevo; abrazar a mi madre y decirle cuánto la quiero. Realmente me dolió no hacerlo, pero bueno, lo haré cuando la vea.
En realidad estoy muy confundido. He perdido el estado de tranquilidad que tenía. Estoy soñando mucho con él. A veces sueño que regresamos, que estamos bien, a veces que me dice que no volveremos. Ya no estoy con él. Él ya cerró el círculo; lo cerró con 2009, al grado que me lo hizo ver en ese mensaje. Yo quisiera hacer lo mismo. Durante el día lo pienso mucho, pero intento distraerme. Cuando no puedo es en la noche, justo antes de dormir, siempre lo pienso y lo recuerdo, con nostalgia. Duermo, duermo mucho, no descanso lo suficiente por mucho que duerma 12 horas. Me levanto cansado y triste; me levanto con ganas de llorar, pero tampoco lloro; sólo estoy triste. Lo extraño, lo extraño mucho. Extraño la plenitud en la que me sentía cuando estaba con él. Extraño esa conexión tan maravillosa que teníamos. Extraño su amor. Pero eso está en 2009. Hoy es 2010. Necesito dejarlo atrás ya.
Estoy volviendo a hablar en las noches, a moverme mucho cuando duermo. Ya no estoy descansando. Hay energías negativas en mí. Necesito transformarlas a positivas para empezar bien el año.
¿Cómo controlar esos pensamientos que llegan solos antes de dormir, en mis sueños y al despertar? ¿Es acaso posible que un duelo genere un trauma o un estrés postraumático? ¿Será que empecé a tener ese estrés postraumático desde que me dijo que me había engañado y que en realidad era prostituto? Fue un evento extremadamente SHOCKEANTE para mí. Recuerdo que no podía ni hablar; sólo lloraba sin poderle contestar algo. Él me preguntaba: ¿por qué lloras? ¡Dímelo!
No lo sé. Tengo un poco de miedo.
Mi objetivo es utilizar estos días, antes de regresar a la oficina, para sacar todo esto y de verdad dejarlo en 2009. Pero no, no lo quiero sepultar, lo quiero realmente dejar atrás, como una parte de mi vida. No quiero seguirlo cargando como parte de mi presente, pero enterrado en lo más profundo de mí.
Quiero aprender esa practicidad, que a veces se transforma en frialdad, para poder cerrar más fácilmente este círculo. Es sin duda el duelo más difícil al que me he enfrentado en toda mi vida, al menos de manera consciente y sabiendo que todo está en mis manos.
Necesito ver a mi terapeuta ya.
Me llama la atención cómo para Carlos fue tan fácil como mandarme un mensaje que decía:
FUE UN PLACER CONOCERTE EN 2009. TODO LO MEJOR. MUAK!
Un mensaje un poco cínico, intentando ser cordial, pero que realmente no era necesario, pues la realidad es que me dolió. Yo no quise contestar, pero le marqué al terminar la fiesta de año nuevo, a las 7 de la mañana. No pude resistir más. Por supuesto, no contestó.
Me sorprende y me duele que la persona con quien he vivido la relación más especial, más intensa y más profunda de mi vida, por muy corta que haya sido, sea tan indiferente. Para él fui uno más en la lista, que ya tiene una palomita. CHECK. Para mí esta relación significó todo, significó cambiar mis planes, mis actividades, mis sueños. Mis sueños eran con él a mi lado, por siempre. Soy un romántico soñador. Yo creí que él, el novio que he tenido con los defectos más grandes de todos, era mi príncipe azul, porque lo acepté y lo amé con absolutamente todas sus características.
Fue inevitable pensar en el año nuevo en todo lo que viví en 2009. Me puse triste en varios momentos. Me puso triste no haberlo pasado por primera vez con mi mamá. No me gustó. No quiero volverlo a hacer así. A mi familia es a la primera que quiero desearle feliz año nuevo; abrazar a mi madre y decirle cuánto la quiero. Realmente me dolió no hacerlo, pero bueno, lo haré cuando la vea.
En realidad estoy muy confundido. He perdido el estado de tranquilidad que tenía. Estoy soñando mucho con él. A veces sueño que regresamos, que estamos bien, a veces que me dice que no volveremos. Ya no estoy con él. Él ya cerró el círculo; lo cerró con 2009, al grado que me lo hizo ver en ese mensaje. Yo quisiera hacer lo mismo. Durante el día lo pienso mucho, pero intento distraerme. Cuando no puedo es en la noche, justo antes de dormir, siempre lo pienso y lo recuerdo, con nostalgia. Duermo, duermo mucho, no descanso lo suficiente por mucho que duerma 12 horas. Me levanto cansado y triste; me levanto con ganas de llorar, pero tampoco lloro; sólo estoy triste. Lo extraño, lo extraño mucho. Extraño la plenitud en la que me sentía cuando estaba con él. Extraño esa conexión tan maravillosa que teníamos. Extraño su amor. Pero eso está en 2009. Hoy es 2010. Necesito dejarlo atrás ya.
Estoy volviendo a hablar en las noches, a moverme mucho cuando duermo. Ya no estoy descansando. Hay energías negativas en mí. Necesito transformarlas a positivas para empezar bien el año.
¿Cómo controlar esos pensamientos que llegan solos antes de dormir, en mis sueños y al despertar? ¿Es acaso posible que un duelo genere un trauma o un estrés postraumático? ¿Será que empecé a tener ese estrés postraumático desde que me dijo que me había engañado y que en realidad era prostituto? Fue un evento extremadamente SHOCKEANTE para mí. Recuerdo que no podía ni hablar; sólo lloraba sin poderle contestar algo. Él me preguntaba: ¿por qué lloras? ¡Dímelo!
No lo sé. Tengo un poco de miedo.
Mi objetivo es utilizar estos días, antes de regresar a la oficina, para sacar todo esto y de verdad dejarlo en 2009. Pero no, no lo quiero sepultar, lo quiero realmente dejar atrás, como una parte de mi vida. No quiero seguirlo cargando como parte de mi presente, pero enterrado en lo más profundo de mí.
Quiero aprender esa practicidad, que a veces se transforma en frialdad, para poder cerrar más fácilmente este círculo. Es sin duda el duelo más difícil al que me he enfrentado en toda mi vida, al menos de manera consciente y sabiendo que todo está en mis manos.
Necesito ver a mi terapeuta ya.
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